


Aquí añado algunos enlaces a periódicos digitales que amplían la información:
-Terra: El Museo Munch exhibe El Grito y La Madonna tras su restauración.
-Terra: El Grito es 20 años más joven de lo que se creía.
Lo único que quería era plantear una pregunta que me corroe las entrañas hasta lo más profundo de mi pituitaria. ¿De dónde viene esta pasión? Especifico. Aquí en Noruega, mientras hay nieve, todos a esquiar y somos los reyes del fondo. Pero llegado el deshielo, este país es tan aficionado al fútbol como todos los demás. Pero claro, los pobres no llegan muy lejos y aún siguen llorando su eliminación de la Copa de Europa de Selecciones. Así, a falta de una liga decente y de una selección en competición. ¿A quién se anima? Yo veo, al menos en Drammen, una pasión, realmente desenfrenada, por el Liverpool. ¿Y por qué? ¿Qué conexión une con un equipo, una ciudad, que algunos ni siquiera sabrán colocar en un mapa? Yo imagino. Se levantan un día y se preguntan ¿cual va a ser mi equipo favorito? Hoy es lunes, pues el Liverpool. A los españoles puedo entenderles porque el Liverpool es la segunda selección española, pero a los noruegos... Bueno, hay un rubio, Riis o algo así creo que se llama, que debe ser muy bueno y creo también que es el capitán de la selección noruega. Tanto "creo" certifica mi nulo conocimiento del balonpié. Entonces se dicen: Hay un rubio... me hago del Liverpool, y así hasta la muerte. Pues nada, pan y circo, McDonaldas y fútbol y todos contentos.
Ya tengo ganas de escribir de Eurovisión, que Noruega con sus rubias y España con nuestro Chiki Chiki, va a ser una verdadera competición. De momento, nosotros tenemos preparada una fiesta en mi casa para seguir este destacado evento.
Acabo de llenar el depósito con diesel, y he pagado más o menos lo que pone el la foto. 12,59 coronas noruegas = 1,61 euros = 268 pts. Pero porque he buscado la oferta, porque ahora el precio habitual está por encima de las 13,50 coronas.
Aquí en Noruega se produce una cosa curiosa. El precio de la gasolina fluctúa constantemente. Tanto que por la mañana puede valer 11kr y cuatro horas después 13kr. No es broma. Los domingos por la noche y hasta los lunes a primera hora es cuando la gasolina está más barata. La política noruega en cuanto al precio de gasolina es la pura ley de la oferta y la demanda. Nulo control por parte del gobierno. Aquí hay una buena explicación de la situación en Noruega. (ver artículo).
Además, otro dato que llama la atención. En las últimas semanas, el diesel es más caro que la gasolina. ¡Y yo que me compré un coche diesel el año pasado por ahorrarme unas coronas! ¿Por qué es esto? En este enlace encontramos un intento de explicación. (ver artículo)
Es curiosa la comparación entre los precios de la gasolina en dos grandes productores de petróleo: Noruega y Venezuela. Noruega tiene los precios más caros del mundo y Venezuela casi regala el preciado líquido. (ver artículo relacionado)
¿Es acertado? La postura noruega se puede discutir, pero la venezolana es claramente discutible. Errónea básicamente. Un precio del combustible menor al de producción quema la riqueza del país, además de incrementar increíblemente el número de coches y la contaminación, con los costes que eso supone.
Pero dejando aparte políticas, da igual si eres socialista, liberal o anarquista, a todo consumidor le duele el bolsillo cuando ve que el precio de la gasolina sube de esa manera. Hace menos de tres meses pagamos el litro de diesel a algo más de 8 kr y ahora ya supera las 13 kr. ¡Cinco coronas (100pts) en menos de cuatro meses! A todo aquel que no conoce un poco de la economía (y la cultura) noruega, le sorprende este dato. ¿Pero no regalan la gasolina en Noruega? ¿Acaso no es el primer productor europeo y el tercero del mundo?
El fondo del petróleo es ese gran desconocido. Para casi todos los extranjeros y para muchos de los noruegos. La cuestión es que el petróleo da mucho dinero, pero aunque parezca sorprendente, ni un céntimo va a los presupuestos del estado. El 100% se invierte en el extranjero, con el fin de no hacer depender la economía noruega tan sólo de este sector, como ocurre en Venezuela, y así no hundir por ejemplo la poca ganadería y agricultura que hay en este país. Y tampoco los réditos de estas inversiones van a los presupuestos, sino que van al ya mencionado fondo, que sirve para prevenir males futuros. Noruega sabe lo que es pasar hambre. Después de la Segunda Guerra Mundial eran muchos los que comían patatas de desayuno, comida y cena. En el estudio comparativo vemos cómo crece la economía noruega en los 70 tras el descubrimiento de los pozos petrolíferos.
Pero ahora escribo como consumidor. La cosa está llegando ya a niveles insostenibles. Y anuncian que puede ser peor. Hasta 19kr por litro en 2008. Vale, los sueldos noruegos son importantes, buena calidad de vida, pero hay muchas familias que necesitan el coche diariamente y esas 1500-2000kr mensuales en combustible dañan gravemente el ahorro familiar, o al menos, la parte destinada a ocio. ¿Qué puede ocurrir? En Noruega hay ricos, muy ricos, que no se verán muy afectados. Pero las clases medias, como la mía, se verán obligadas a ahorrar por otros lados y eso provocará diferencias sociales y clasismo. Los impuestos indirectos gravan a todos los contribuyentes, independientemente de su renta, y aquí gasolina, tabaco y alcohol tiene precios que hacen subir los colores.
Y acaba mi crónica con una pregunta al tiempo que súplica a los gobernantes noruegos: ¿Tan difícil resultaría aligerar un poco el gravamen sobre el combustible en estos momentos en que el precio mundial del crudo está por las nubes, para aliviar un poco la economía de las familias?