Mi podcast: ¿Y por qué no aquí?

jueves, 18 de diciembre de 2008

Cosas que tú nunca harías en la nieve

Ya se publicó mi último artículo en Soitu: "Cosas que tú nunca harías en la nieve". Me encanta esto de Vidas Urbanas en Soitu. Me da una opción tremenda de escribir con libertad, casi lo que me dé la gana. Respetan el texto original al máximo. Y esta vez hasta mis fotos. Creo que me ha quedado un texto divertido y que os gustará.
Antes de pegar el texto, mensaje a los lectores. Lo pongo aquí y no como respuesta a los comentarios, porque es más fácil de leer:
-Al lector que pedía fotos y videos de mi casa: Ya las hubo, en Facebook, y me costó una estupenda bronca familiar, por poner "a manos de los ladrones valiosísima información sobre nuestra casa", o una traducción similar del noruego-español. Así que no volveré a cometer el error de publicar en Internet, la foto de la mesa de salón para doce personas. La podéis ver si venís a comer a mi casa algún día. Un lector es ya casi como un amigo. Tengo por ahí alguna foto de la casa por fuera. Ya la publicaré cuando la encuentre.
-A Carlos de Argentina: Estaré encantado de responder e-mails a todo el que tenga alguna curiosidad sobre este país de luces y sombras. De hecho, gracias por poner tu nombre y mandar un e-mail, porque los comentarios con firma anónima, siempre me crean una incertidumbre tremenda, aunque lo que se ponga sea muy bonito.
REPORTAJE DE SOITU:
Cosas qúe tú nunca harías en la nieve
Adaptarse o morir. Desde finales de octubre y hasta bien entrada la primavera, casi toda Noruega está cubierta por una gruesa capa de nieve. Las carreteras están heladas y la luz brilla por su ausencia. Pero la vida sigue. No hay elección. En España, en cuanto caen cuatro copos, Protección Civil activa la alerta roja, los niños dejan de ir a las escuelas, los coches circulan por las cunetas y el programa España Directo tiene arreglados reportajes para los próximos días con visitas a los pueblos incomunicados. En Noruega no se ven muchos niños haciendo guerras de bolas de nieve. La rutina aburre. Con nieve se hace vida normal. Y cosas no tan normales. Actividades que a un españolito de a pie jamás se le ocurrirían en estas circunstancias. En los tres años que llevo aquí, he visto algunas que me han llamado la atención, pero seguro que hay más.
Comer helados bajo la nieve
Estoy llegando a mi casa y oigo una musiquilla. Es una campanilla a la que estaba acostumbrado en verano, pero me llamó poderosamente la atención tras las grandes nevadas y con el termómetro ya tiritando. Era el camión de los helados. El 'isbilen', como se llama en Noruega, se pasea por las calles vendiendo helados, aunque lo que más apetezca en estas circunstancias sea una docena de castañas asadas. Y el negocio funciona, a pesar de que baste sacar un bote de nocilla al balcón para tener helado de chocolate. Aquí se come helado durante todo el año, lo que el gremio de heladeros españoles lleva intentando lograr desde hace años. La pasada Semana Santa, ya con calorcito en España, intenté comprar un helado en Valladolid y fue imposible porque la máquina aún no estaba enchufada. Poca visión comercial.
Hacer una barbacoa sobre la nieve
A los noruegos les gusta mucho el campo. El perfecto plan de fin de semana es dejar Oslo, irse a la cabaña, 'hytte', y darse paseos con o sin esquís. En una ocasión, yo me fui al bosque con dos amigos, y me llamó poderosamente la atención que en el super compraron varios paquetes de salchichas. '¿Pero cómo vamos a comer eso?', pensé yo. Pero estos noruegos están mejor equipados que McGuiver. Ya en pleno bosque, uno sacó el machete, cortó unas ramas de las partes bajas de los árboles, completamente secas, las colocaron sobre la nieve y, sobre esto, varios palos que también habían escapado de la humedad. E hicieron un fuego. Asamos las salchichas, que acompañadas de café del termo, hizo olvidar la rasca que nos envolvía. Una experiencia para recordar.
Bebés durmiendo a bajo cero
Esto nunca lo llegaré a entender. Paseas por las calles de Oslo, y ves cochecitos de niños aparcados a las puertas de los bares, con una mantita que los cubre. Te arrimas un poco y, sí, ves que hay alguien dentro. Cuando estás a punto de llamar a la policía por abandono de niño con peligro de muerte, sale una rubia madre sonriente, recoge al bebé y aquí no ha pasado nada. En Noruega, es normal sacar a los bebés a dormir la siesta a la calle. Haga el frío que haga. Se utilizan una especie de sacos de dormir que aguantan temperaturas de hasta 40 grados bajo cero. Pero nunca lo llegaré a entender. Si es tan sano dormir en la calle, ¿por qué los padres están dentro tomando un café calentito? ¿Y si el bebé se mueve más de la cuenta y deja parte del cuerpo a la intemperie? No hay dolor. La foto que acompaña este texto está tomada desde la ventana de mi casa. Y sí, hay un bebé dentro. No tuve el valor de salir a la calle a echar la foto, porque había 9 grados bajo cero.
Fumar aunque se te caigan los dedos
Supongo que en breve, con las nuevas leyes antitabaco, esto pasará también en España, pero de momento, la imagen que se logra en Noruega es sorprendente. Caminado por las zonas de bares, se observan que están todas las terrazas puestas, con una capa de muchos centímetros sobre las mesas y mantas sobre las sillas. Aquí no se permite fumar en ningún lugar público, y el precio del paquete es de diez euros. Pero la adicción no entiende de limitaciones. Tanto en los bares o restaurantes, como en casa, cuando entra el gusanillo, uno se calza el chaquetón, sale a la terraza, se pone lo más cerca que se pueda de la lámpara calefactora y libera sus ansias de nicotina. Siguiendo con la visión comercial, en Noruega se venden muchos guantes a los que se les pueden quitar los dedos. En España yo esto se lo había visto a fotógrafos profesionales, pero nunca a fumadores habituales.
Circular a 100 km/hora y sin cadenas
En Noruega todos han de tener dos tipos de neumáticos. De invierno y de verano. A partir del 1 de noviembre, si las nieves no se han adelantado, es obligatorio cambiar a las ruedas de invierno. Las hay con el dibujo muy pronunciado, pero las que dan más seguridad son las que tienen clavos. Pero no todo el mundo usa de este tipo, porque para entrar en Oslo con ellas tienes que pagar una tasa de 30 coronas como impuesto ecológico, que añadido a las 20 coronas que todos han de abonar como peaje, supone un incremento de 6 euros la visita a la capital. También hay una opción de impuesto anual, pero realmente cara. Por ello en la capital casi todo el mundo utiliza ruedas sin clavos, y se sacan el 4x4 del garaje cuando se van de fin de semana a la cabaña. En general, este tipo de neumáticos da gran seguridad y el agarre es muy bueno, por lo que se puede hacer una conducción casi normal.
Cierto es que Noruega es el país del frío. Pero el gore-tex y las ventanas con buen aislante lo disimulan. Porque ocurre algo curioso. Si vivo aquí a 15 bajo cero, ¿por qué me resfrío cada vez que visito a mis padres en España en Navidad?

lunes, 15 de diciembre de 2008

Arde Noruega

No pensaba escribir sobre los fuegos en Noruega, porque me parecía un poco aburrido publicar todas las crónicas que envío a RNE (que no son muchas, también hay que decirlo), y porque es un poco macabro. Pero a petición de alguno de mis "fans" secretos, tengo que hacerlo. Por cierto, si me vais a insultar, podéis ser anónimos, pero si vais a publicar algún comentario simpático como el último, agradecería una firma, para poder ponerle cara al lector y agradecerlo debidamente.
Esta es la noticia que envié el domingo, 14 de diciembre, que se emitió en directo en el boletín de las 10.30h.
Buenos días,
La sombra de un pirómano ronda en torno al peor incendio de los últimos 70 años en Noruega, que ayer acabó con la vida de 6 personas, otra gravemente herida, once con quemaduras y hasta 33 desalojados de un edificio de cuatro plantas en un barrio de mayoría inmigrante en Oslo. Varios vecinos del edificio piesan que podría estar provocado, según informa la prensa noruega, y la policía investiga ahora esta posibilidad. Sin embargo, los bomberos afirmaban que podría deberse a las basuras acumuladas en las escaleras. Los cuerpos de los seis fallecidos se encontraban en el vestíbulo, por lo que se cree que trataban de huir de las llamas. El fuego sorprendió de madrugada a los vecinos, que salieron a las ventanas a pedir auxilio, y por donde tuvieron que escapar la mayoría de los ilesos. Otros dos fuegos acabaron ayer con la vida de dos personas en diferentes partes de Noruega,uno de los países con mayor índice de incendios, debido en parte a que las casas se construyen en madera y el uso de velas está muy extendido.
Esto fue por la mañana, pero las noticias evolucionaron y en uno de los dos incendios, llegaron a morir 4 personas, y una anciana murió por el fuego de un brasero. Ha sido un fin de semana negro en Noruega (y sin intención de hacer humor del mismo color en un tema tan trágico). Además, ya publiqué hace unas semanas un fuego que aquí en Drammen acabó con la vida de seis trabajadores polacos. El fuego es un verdadero problema en este país. En lo que va de año, han perdido la vida 77 personas a causa de los incendios en la viviendas. Mi mujer estuvo hace un par de semanas en un curso de prevención de incendios, obligatorio en muchos trabajos, y el bombero encargado de impartirlo les dijo que Noruega es el país del mundo con mayor número de incendios por habitante. Y en parte no es de extrañar. El centro de Oslo no se distingue de otra ciudad, pero todo el resto de Noruega esta construído en madera. Totalmente en madera. Unido a la tradicción por las velas, puede convertirse en un cóctel mortal. Cada noche, mi mujer enciende cerca de 15 velas en la casa. A veces no sé si estoy en mi casa o en la catedral de la Almudena. En algunas ocasiones, tan cerca de las cortinas que me veo obligado a apagarlas. Cierto es que van dentro de vasos que las hacen supuestamente inofensivas, pero a un español no acostumbrado a la luz indirecta, le resulta peligroso. En Noruega no encuentras casi nunca lámparas en el techo con bombillas de 100w. No tienes más que darte un paseo por IKEA, para comprobar que casi todas las lámparas son de luz indirecta, lo que en ocasiones da una sensación de penunbra que a mí me agobia. Tras los últimos incidentes, parece que las autoridades se van a poner más serias, y van a hacer inspecciones en las casas para asegurar que los detectores de incencios (aparatos que sueltan pitidos insoportables al contacto con humo, en caso de incendio cuando durmes) y otras medidas de seguridad funcionan. Nos tocará otra vez rascar el bolsillo, pero en asuntos como este, merece la pena invertir.

domingo, 14 de diciembre de 2008

Nobel 2008

Un año más, la entrega del premio Nobel de la Paz en Oslo me ha mantenido ocupado, y entre esto y alguna que otra noticia más, como la firma del Tratado contra las Bombas de Racimo, del que hablaré otro día, y un incendio en Oslo con más de 6 muertos, tenía el blog un poco abandonado. Tengo varias cosas pendientes, pero en general no me gusta escribir sólo por rellenar, así que ya escribiré cuando tenga tiempo o me aburra. De momento, dejo aquí las fotos que hice durante la semana Nobel en Oslo y un par de las crónicas que se emitieron.



Rueda de prensa (9.12.08)
Oslo se viste de gala para celebrar mañana su mayor acontecimiento político y social del año, la entrega del Nobel de la Paz, uno de los más prestigiosos y el único que se otorga en la capital Noruega, ya que el resto se entregan de forma paralela en Estocolmo.
El premiado de este año, Marti Aatisari, ex presidente de Finlandia, por su labor en las últimas tres décadas para resolver conflictos internacionales, se encuentra ya en Oslo, donde hoy ha dado una rueda de prensa. Allí se le han preguntado sobre las principales crisis en el mundo, como Afganistan, Oriente Medio o el cambio climático, pero sobre ninguno mostró una postura muy clara. Tan sólo sobre la independecia de Kosovo, de la cual el fue impulsor, ha sido claro defensor, admitiendo que es un proceso irreversible y que espera que más países lo reconozcan. Además, abogó por la inclusión de todos los países balcánicos en la unión europea, incluido serbia, siempre que, según sus palabras, acepte el pasado y admita sus errores en al relación con Kosovo. Aatisari espera que este galardón le ayude a estrechar las colaboraciones con los gobiernos, y en torno a su discurso de mañana, adelantó que mandará algún mensaje al presidente electo norteamericano, Barack Obama.
Ceremonia de entrega en el Ayuntamiento (10.12.08)
Con toda la pomposidad y el protocolo que un acto de estas características merece, acaba de terminar hace unos minutos en el Ayuntamiento de Oslo la entrega del premio Nobel de la Paz 2008, al ex presidente de Finlandia, Marti Aartishari, por su labor de intermediario en múltiples conflictos internacionales.
Como cada año, el discurso por parte del premiado es el momento más esperado, pues siempre supone un toque de atención a los líderes del mundo para luchar por la paz. En esta ocasión, Aartishari no ha sido menos, y el presidente electo norteamericano, Barack Obama, ha sido su principal destinatario.
Al él le ha dicho que debe dar prioridad al conflicto en el Medio Oriente durante su primer año de mandato. También apeló a la Unión Europea, Rusia y Naciones Unidas, para encontrar una solución a los problemas en Israel, Palestina, Irak e Irán, pues dijo que hacen falta resultados y no sólo intenciones de ayudar. Aquí añadió que los motivos religiosos han sido usados como arma para prolongar conflictos, a pesar de que las religiones en sí mismas buscan la paz.
Durante su lectura, desgranó las características que debe tener un mediador, pero destacó que los únicos que pueden lograr la paz son las partes de un conflicto, y remarcó que todos pueden ser resueltos y no hay ninguno inevitable. Aartisari añadió que la crisis financiera no puede ser una excusa y la lucha contra la pobreza es la medida más efectiva para evitar el terrorismo a largo plazo.
Ayer se daba a conocer que el Comité Nobel sueco investigará al noruego para comprobar que respetan el testamento de Alfred Nobel, a lo que el presidente del comité noruego, Ole Danbol, hizo una referencia en su discurso, afirmando que el testamento no se puede interpretar literalmente. Respecto al premiado, destacó especialmente su labor en Namibia y Kosovo, uno de los conflictos en los que Aartisari ha mediado más controvertidos y de los que más se ha hablado en los últimos dos días. Danbolt, al igual que Aatisari, afirmó que Kosovo es independiente y no hay otra solución.
Resumen del día y Nobel en Estocolmo (10.12.08)
Buenas tardes. Poco después de la una y media de la tarde, Marti Aatisari, ex presidente de Finlandia, recibía la medalla que le reconoce como el Premio Nobel de la Paz 2008, por su labor mediadora en conflictos internacionales. Su trabajo en Namibia y en Kosovo, donde Aatisari defiende su independencia como única solución, son los más reconocidos.
La semana de los Nobel no acaba con esta ceremonia. Esta tarde se han entregado también el resto de premios en Estocolmo y en breves momentos comenzará un gran banquete en Oslo. Mañana, el tradicional concierto en homenaje al premiado, contará con la participación de la mexicana Julieta Venegas, Il Divo o Diana Ross, y los actores Michael Caine y Scarlett Johannson serán los maestros de ceremonias.
Pero el galardonado quiso destacar en su discurso la urgencia de resolver la crisis en Oriente Medio, por lo que hizo una llamada a Barack Obama y los líderes internacionales para hayar una solución.